¿Por qué voy a votar por Antanas Mockus?

Mañana es 30 de mayo, día de elecciones presidenciales. Quizá para unos el tema no sea de su interés y simplemente sea un fin de semana mas, otra vez girando entorno de la muy aburrida y predecible política colombiana. Para otros (afortunadamente, y me incluyo en este grupo) mañana es el día en que tenemos la oportunidad de elegir el futuro que queremos.

Pero, ¿Qué hace que mañana sea un día tan importante? ¿Por qué dicen que las de mañana serán unas elecciones históricas? ¿Qué es lo que está pasando? , la respuesta es muy simple: mañana es un día histórico por que elegiremos al sucesor de un presidente que ha hecho historia.

Seamos o no Uribistas (aclaro, jamás lo he sido), hay que reconocer que Álvaro Uribe ha sido un presidente que ha hecho historia en nuestra frágil democracia porque ha cambiado la manera tradicional de gobernar que han tenido sus antecesores (bueno, por lo menos los que yo recuerdo). Uribe, ha sido un presidente que a lo largo de sus 8 años de gobierno se ha preocupado por crear entorno a su nombre y su imagen una historia que lo ha catapultado como el mesías de la patria: antes de él todo era oscuridad pero desde su llegada a la Casa de Nariño (O de Nari, ya no estoy seguro) hemos alcanzado la luz y no podemos permitir que las tinieblas cubran de nuevo la historia de Colombia.

Esa idea mesiánica entorno a Uribe le ha permitido a él y a sus discípulos (ahhhhhh siiiii, como los “12 apóstoles”) gobernar y legislar de una manera no tan santa infringiendo leyes y normas a diestra y siniestra sin que aún hoy veamos las consecuencias penales de esos actos (aquí no estarán de acuerdo Sabas Pretelt ni Mario Aranguren). Chuzadas, agro ingresos, seguimientos ilegales, participación indebida en política, falsos positivos, cohecho, corrupción y parapolítica son solamente algunas de las “picardías” con las que hemos convivido los colombianos en estos 8 años de un gobierno que por allá cuando hacia campaña en el año 2000, sacó un manifiesto democrático que en el punto 97 dice así:

97. “Ofrezco un gobierno serio, eficaz, honrado, no milagroso. Temo a la demagogia y al populismo porque la frustración de las promesas electorales afecta la credibilidad democrática”

(Ahh que hermosas, palabras las que repetía “el mesías” en aquellos aciagos días, lástima que él y los suyos las hubiesen olvidado tan pronto).

Es justamente ese gobierno al que debemos cambiar mañana en las elecciones, al gobierno que nos ha cobrado con corrupción (mucha corrupción) el hecho de habernos devuelto la seguridad a algunos (aquí los miles de desplazados me dan la razón), a través de su programa bandera de “seguridad democrática” con el cual se ha reactivado el turismo y la “migración” (ojo migración y no desplazamiento, ¿cierto José Obdulio?) por todos los rincones de la patria.

Sustituir a un presidente tan querido como odiado (eso si polémico) no es tarea fácil; hay quienes (sus mas firmes y enceguecidos seguidores) que esperan que mañana sigamos por el mismo camino que nos ha trazado el Uribismo, otros (espero que la mayoría) aún cuando reconocemos uno que otro acierto en seguridad y economía, queremos tomar un camino mas recto y transparente en pocas palabras menos “torcido”.

Yo, he elegido a Antanas Mockus para que nos guíe por ese nuevo camino, porque creo que es un digno representante de lo que es la transparencía y busca corregir el mayor problema que tiene Colombia hoy en día: la falta de ética a todo nivel.

¿De donde he sacado yo que el problema de Colombia es de tipo ético?, muy sencillo basta con mirar alrededor. No es ético el político corrupto, pues se supone que en él hemos confiado nuestra representación y ser garante de la correcta utilización de los recursos públicos, no es ética una guerrilla que ha dejado de lado los ideales revolucionarios que buscaban una equidad social, y que se ha convertido en grupo terrorista bajo las órdenes de un puñado de narcotraficantes, no es ético ni honorable, un ejército que hace alianzas criminales para combatir a su enemigo… tantas y tantas cosas que no son éticas en un país en el que le celebramos y aplaudimos a la “viveza” que haría mucho mas extenso este texto.

No voy a decir tampoco que soy la reencarnación de la madre Sor Teresa de Calcuta; para dar un ejemplo, yo también me he colado en muchos sitios sin pagar, comprado software pirata y copiado en un examen, y eso tampoco es correcto; ni ético, está mal hecho y por lo tanto me hace culpable, pero es tiempo ya que cortemos con esa historia que aplaude y nos motiva a la “viveza” (atajos como dice Antanas), es momento que empecemos a construir una sociedad basada en principios éticos y empecemos a recuperar la confianza los unos en los otros y a sentir real vergüenza ante las trampas.

Es por eso que yo elijo a Mockus, porque creo que es un tipo correcto y transparente, porque estoy convenciso que nos guiará correctamente por el camino en la búsqueda de corregir eso que yo creo es el mal más grande de Colombia: la falta de ética. El día que el político basado en sus principios deje de robar el erario y sienta vergüenza de hacerlo, habrá un uso más eficiente de los recursos y por lo tanto mayores posibilidades de inversión, si hay más posibilidades de inversión podremos construir una sociedad más justa y una sociedad más justa desvirtúa la lucha armada… y así puedo seguir haciéndolo parecer fácil casi una utopía, pero yo creo que no es imposible, nos tomará algún tiempo cambiarnos el “chip”, pero un gobierno limpio y transparente más que un ejemplo es un muy buen comienzo y yo creo que Mockus realmente nos ha demostrado que puede hacerlo. Por eso mañana y de ser necesario en segunda vuelta yo voy a votar por Mockus.

¡¡¡¡ Ya está puesta la mesa, la mesa de la abuela, bienvenidos todos los comensales !!!!

Está es una introducción necesaria, por muchos motivos. El primero de ellos: “matar” la fiebre de publicar la primera entrada y con ello de paso, abrir oficialmente este blog; proyecto que venía maquinando hace mucho rato pero al que siempre le había dado largas por diversos motivos, que a decir, verdad no eran muy de fondo.

El segundo motivo de está introducción es explicar el origen del nombre de este blog: LA MESA DE LA ABUELA. Este nombre lo utilizo como metáfora de una anécdota graciosa difundida entre mi familia, según la cual, la mesa del comedor de mi abuela además de su función natural de permitir a los comensales ingerir cómodamente sus alimentos, era un universo único en el que se podían encontrar toda suerte de objetos no necesariamente relacionados con temas alimentarios: cordones, bolsas, papeles y hasta herramientas compartían espacio con vasos, copas y botellas de diversos colores y tamaños. Para un niño como yo en aquella época, el desorden de esa mesa era lo de menos importante, ¡Todo lo contrario!, era un universo de maravillas y cosas curiosas que hacían entretenida cualquier comida.

El tercer y último motivo es contestar la pregunta ¿Qué van a encontrar aquí?, solo puedo decirles que espero que este blog sea como la mesa de mi abuela, un lugar en el que se pueda encontrar de todo un poco. Aún cuando me temo mucho que el grueso de las entradas que se publicaran versarán sobre temas políticos, espero que todos encontremos aquí un espacio para debatir ideas alrededor de temas de interés general tomando necesariamente como punto de partida mis puntos de vista (Al fin y al cabo el blog es mío y por algún lado hay que empezar…jejeje), o simplemente un lugar para compartir historias curiosas para pasar un rato agradable.

Bueno mi gente, la mesa está servida vamos a ver cómo nos va con esta nueva empresa. Bon Appétit